Dicen que equivocarse es humano, perdonar es divino y por supuesto, rectificar es de sabios.
A través de nuestros errores tenemos la oportunidad de reflexionar y aprender algo nuevo. Cuando revisamos las consecuencias de una acción que acabamos de realizar, es cuando podemos reconocer el error que cometimos. Debido a esto, nos resulta tan difícil prevenir algunos errores, porque sólo podemos reconocerlos una vez que los hemos cometido.
Desarrollar la capacidad de reconocer y aceptar nuestras equivocaciones amplía nuestra visión de la realidad, nos impulsa a asumir nuestra responsabilidad y nos enseña, además, a reconocer la presencia de personas afectadas por las consecuencias de nuestras equivocaciones.
Porque en esta vida, todo lo que nos pasa nos enseña, de alguna manera u otra, lecciones que hacen que seamos más fuertes, más precavidos, más empáticos o como mínimo nos enseñan a no volver a cometer esos errores. Son moralejas que nos da la vida y que tenemos que exprimir para sacar partido y ser mucho más felices con nosotros mismos y con los que están a nuestro alrededor.
Yo me quedo con lo de "rectificar es de sabios".
Aunque después de todo dicen que el ser humano es el único que tropieza dos veces con la misma piedra no?
Ideasdecaracol*
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